Apenas acaba de comenzar el año y yo ya le estoy dando vueltas a lo que nos espera deportivamente. Para todos los aficionados al deporte en general y de los Juegos Olímpicos en particular, cada año olímpico que empieza es un reto y una ilusión grandísimos. El año arranca con 122 deportistas clasificados para Río; bien es cierto que de ellos hay 4 equipos; los dos de hockey, balonmano femenino y el de baloncesto masculino y eso hincha un poco la cifra pero en estos meses que nos quedan hay muchos procesos de clasificación abiertos y la posibilidad de tener una delegación que ronde los 300 deportistas no es desbaratada. En Londres desfilaron unos 290, no recuerdo bien la cifra. Y eso significa que tenemos muchos frentes abiertos, muchos puntos de interés, variedad en los deportes a seguir.
Individualmente destacaría ahora mismo a Javier Gómez Noya, Carolina Marín, Mireia Belmonte, el dúo de sincronizada (Gemma y Ona), Miguel Ángel López en marcha, Fátima Gálvez y Alberto Fernández en tiro, Maialen en piragüismo, los tenistas, los regatistas, el equipo de rítmica, Ray Zapata en gimnasia masculina....Seguro que me dejo a alguno por ahí perdido y espero que tengamos muchas sorpresas y muchas medallas.
Todo eso anima a los espectadores a seguir la competición por televisión sea cual sea el deporte. Es curioso el efecto que producen los JJOO. Se crea una atmósfera especial y personas que nunca verían determinado deporte en cualquier otra fecha, durante los Juegos Olímpicos se ven todo lo que se retransmite, especialmente cuando hay deportistas españoles compitiendo. Se unen los factores de que es verano, la gente está de vacaciones, hace calor y nos acostamos tarde....pero todo eso en su conjunto hace de los Juegos el espectáculo televisivo por excelencia.
Comienza el año y yo ya estoy pensando en el 5 de agosto.
¡Qué ganitas....!
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